¿Qué tienen que ver las hipotecas con salmón del atlántico, la globalización y los vehículos deportivos utilitarios? Todas usan petróleo, pero ya está por llegar a su pico. Así que puedes imaginarte cuánto ha subido el precio del bombeo, aumentando los costos de transporte y por ende los de la comida. Esto signfica que tenemos que ganarle a los combustibles fósiles y cambiar nuestra forma de vida para adaptarnos a un mundo en escasez. La buena noticia es que los vecinos y vecindarios están a punto de volverse importantes en un futuro no muy distante. Margaret Mead, una famosa antropóloga una vez dijo que nunca hay que subestimar a un pequeño grupo de personas pensando en cómo cambiar el mundo cuando son los únicos en hacerlo. Así es como el poder comunitario tiene lugar. Pensando y actuando en nuestras localidades es la única manera en que podremos enfrentar los problemas actuales y los que siguen. Estamos hablando de un gran reto, las emisiones de CO2 están afectando la atmósfera, y si la temperatura global aumenta en promedio más de dos grados el impacto será más devastador de lo que uno puede imaginarse. Una manera en la que las personas pueden enfrentar problemas y ver que hacer al respecto es mediante la OSEA (Sociedad de Energía Sostenible de Ontario) y los grupos comunitarios, obteniendo beneficios económicos a la vez. La energía renovable y el acta de economía sostenible son únicas y totalmente nuevas en norteamérica. Han creado un marco de trabajo en equipo para que las comunidades puedan convertir la visión en acción.